Un proceso que permite redescubrirse

Así como el propósito y espacio de Hankins Studio es singular, así también lo es nuestro camino para conseguir los mejores resultados. Lo esencial para nosotros es escuchar al músico: qué material (demo) tiene, qué quiere conseguir, qué desea transmitir o potenciar y aún más: qué podemos ofrecerle desde la más absoluta honestidad.

Con ese fin planteamos una reunión inicial o de PREPRODUCCIÓN que nos permita alinearnos e ir en busca de los mismos objetivos. Cuando se trata de una canción podemos trabajar las armonías, la melodía, el ritmo, así como el motivo y forma.

Estos cuatro aspectos son fundamentales para darle a la canción lo que exige para ser poderosa desde una perspectiva musical. En este primer momento, hablaremos sobre estos ingredientes y también sobre el estilo que deseamos. Detallaremos el proceso de producción y qué equipo utilizaremos para llevarlo a cabo. Con toda esta información, plantearemos un calendario de trabajo y un presupuesto.

Ahora estamos preparados para la parte más importante y exigente, pero al mismo tiempo placentera del proyecto: la PRODUCCIÓN. Es el momento de centrarnos en la música, darle alas, probar instrumentos…

Una perspectiva integral

Trabajamos en el estudio para aterrizar todo aquello que imaginamos desde la composición, la interpretación o los arreglos. En esta parte del proceso, la conexión y comunicación con el artista debe fluir. Una canción es de alguna manera una historia y nosotros estamos aquí para contarla de la mejor manera posible. Con esto en mente ponemos a disposición no solo nuestra experiencia, sino también el equipo más variado y de alta gama: procesadores, sintetizadores, instrumentos, micrófonos, consolas, y demás.

En Hankins Studio nos hemos preocupado por darle espacio a instrumentos, micrófonos o amplificadores únicos o antiguos que son capaces de añadirle algo especial a las producciones y por qué no, de romper esquemas. Cuando usamos estos equipos, estamos en el camino de buscar transmitir emociones que, de alguna manera, también son únicas.

En muchas ocasiones, la POSTPRODUCCIÓN se realiza a la par que la producción como las grabaciones en directo. Si este no fuera el caso, estamos listos para editar, mezclar y finalmente masterizar para optimizar la calidad de lo reproducido. El producto, finalmente, está listo para ser compartido con el mundo.

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